CULTURA

The Northman: una historia de venganza épica

SERENDIPIA   |   Varykino Aarón   |   Mayo 16, 2022

The Northman es el tercer largometraje del director Robert Eggers, quien nos sorprendiera en 2015 con The Witch (La bruja) película de terror sobrenatural protagonizada por Anya Taylor-Joy (The Queens Gambit) y repitiera el plato en 2019 con The Light-House (El faro), cinta de terror psicológico rodada en blanco y negro, protagonizada por Robert Pattinson (The Batman, Twilight) y Willem DaFoe (Platoon, Spiderman, Nymphomaniac y un largo etcétera). Si bien su filmografía es muy corta para impresionar a los puristas, la calidad de sus cintas deja entrever un futuro bastante prolífico y esperemos que sea así por el bien del cine.

La cinta es un drama histórico que nos sitúa en la Islandia de principios del siglo X cuando el Rey Cuervo: Horvendill, interpretado por Ethan Hawke (Before Sunset, Alive, Training Day), regresa a su reino tras salir triunfante de una campaña militar junto a su hermano Fjölnir, encarnado por Claes Bang (a quien de seguro recuerdan por interpretar a Drácula en la nueva serie de Netflix, ¡Imperdible!). Tras su llegada son recibidos por la reina Gudrum (Nicole Kidman, creo que no necesita presentación) y el adolescente heredero al trono Amleth (sí, el drama de Shakespeare se basa en esta historia nórdica) para ser partícipes de una celebración acorde con las hazañas realizadas en batalla.

La historia se desencadena a raíz del fratricidio del rey Cuervo a manos de Fjölnir, tras lo cual el pequeño Amleth huye jurando vengar la muerte de su padre y liberar a su madre del tirano fratricida. Hasta ahí pareciera una historia predecible, sin embargo, la película tiene muchísimo que ofrecer a lo largo de sus 2 horas 17 minutos y cumple con creces.

Como les mencioné, si son seguidores de las series protagonizadas por vikingos van a amar esta película pues tiene de todo: violencia extrema, sangre, misticismo (ver a Björk en pantalla es una delicia, sobre todo cuando habla), mitología nórdica, cristianismo, drogas alucinógenas, cuerpos tonificados (chicas van a romperse el ojo con tanto vikingo), chuculún, drama, traición y sobre todo un ritmo trepidante que nunca llega a cansar, sino que, al contrario, te deja con ganas de más.

Tanto la fotografía como la banda sonora juegan un papel protagónico en esta cinta, pues crean la atmósfera perfecta para ser partícipes de lo épico de la historia de venganza de Amleth. Las imágenes son lúgubres y de tonos bastante fríos que nos remiten emociones ominosas y desangeladas en algunos tramos, para luego mostrarnos escenarios oníricos cautivantes que son rematados con tonos más agresivos cuando llegamos a los últimos tramos del film. Asimismo, la banda sonora es un ente con vida propia, que va marcando el ritmo de las acciones y nos hipnotiza con cadencias que revuelven algo dentro de nosotros que no sabría explicar con palabras, pero que nos mete de lleno en la historia; en serio que tienen que verla para experimentar lo que les estoy diciendo.

Con respecto al atribulado Amleth, encarnado por un Alexander Skarsgård (Generation Kill, Tarzan) físicamente impresionante (en serio, no me malinterpreten, el tipo se ve gigante y cuando está ataviado de lobo es realmente perturbador) su interpretación cumple con lo requerido por el personaje sin ser caricaturesco, pues recordemos que los vikingos suelen ser retratados como salvajes sin mucha cabida para la intelectualidad sino como un cúmulo de emociones viscerales extremas; Skarsgård nos muestra un personaje carcomido por el odio y la desolación, pero que va evolucionando emocionalmente hasta encontrar su destino, para luego desatar esa furia casi animal que tanto estábamos esperando. Cumple y cumple bien.

Un punto aparte son los personajes de Nicole Kidman y Williem DaFoe. La primera nos regala y una de sus mejores performances ¡De lejos!, pues la reina Gudrum está llena de matices que te dejan boquiabierto y los recursos actorales de Kidman son superlativos sin ser grandilocuente. Por otro lado, DaFoe encarna a Heimir, una especie de bufón y místico que le muestra al protagonista el destino que le espera y para el cual deberá prepararse con ahínco; si bien este personaje tiene pocos minutos en pantalla, DaFoe nunca se guarda nada a nivel interpretativo.

¿Recomiendo ver The Northman? ¡Pues claro! No saldrán decepcionados de la historia a pesar de parecer predecible, como se dice: Lo importante es el camino, no el destino y esta película trata de ello. Disfrútenla.

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