CULTURA

«Gambito de dama»: 7 episodios maravillosos

SERENDIPIA   |   Varykino Aarón   |   Agosto 04, 2022

Sé que esta serie está en Netflix desde hace un par de años y que fue un boom cuando se estrenó, pero quien me conoce realmente sabe que no suelo plegarme a las modas porque suelen ser escenarios más de pose que de convicciones, por lo que esperé a que pasara toda la expectativa de la serie para recién darle una oportunidad y en esta zozobra producto del consiguiente olvido de la misma es que he podido apreciarla de manera tranquila y alejada de cualquier expectativa.

The Queen’s Gambit (Frank, Scott, 2020) es una excelente miniserie dramática de 7 capítulos, basada en la novela homónima de Walter Tevis (Random House, 1983), que nos cuenta la historia de Beth Harmon, una huérfana prodigio que se abre paso a través del elitista mundo del ajedrez gracias a una excepcional capacidad de análisis y predicción del juego. Harmon es descubierta como portento gracias a William Shaibell, conserje del orfanato en el que vive, quien le enseña los primeros compases del juego y la empuja a entrar en el maravilloso mundo de la estrategia del ajedrez. Por azares del destino logra dejar el orfanato y empezar una aventura que la lleva a recorrer el mundo en pos de coronarse como Maestra de esta noble disciplina.

Como dato curioso hay que agregar que la serie ostenta el título de la más vista en la plataforma de Netflix hasta el día de hoy, además la adaptación recibió dos premios Globo de Oro: «mejor miniserie o telefilme» y «mejor actriz de miniserie o telefilme» para Taylor-Joy. Por otro lado, para quienes quieran saber de qué va el ajedrez habría que decir que su historia se pierde en el tiempo, sin embargo, existe un consenso casi general de que su origen se remonta al siglo XV en Europa, tomando como referencia a prototipos más antiguos del juego de origen persa e indio que evolucionaron hasta el ajedrez que conocemos hoy en día.

La miniserie, protagonizada por Anya Taylor-Joy (The Witch, Peaky Blinders, The Northman) nos da una visión general y cuasi histórica de esta disciplina que es muchas veces señalada como elitista y peor aún machista, paradigma que el periodista especializado en ajedrez Leontxo García (a quien de seguro conocen por el meme «Maravillosa jugada») da por tierra en una excelente conferencia que les invito a ver en el canal de YouTube «BBVA Aprendemos Juntos 2030» bajo el nombre de «V. Completa. El ajedrez es el mejor gimnasio para la mente. Leontxo García»

Anya Taylor-Joy destaca por encima de sus coprotagonistas, no solo por interpretar al personaje principal de la historia, sino por entregarnos una performance llena de matices que hacen creíble y sobre todo humana a Beth Harmon. Si bien es cierto, una vez que uno ha visitado la filmografía de Anya verá que sus dotes actorales son equivalentes a las de Keanu Reeves o Nicolas Cage (basta con verla en Peaky Blinders para más luces sobre el tema) en el caso particular de la miniserie que nos convoca encajan muy bien, pues nos regala un personaje atribulado, que tiene claros desórdenes emocionales producto de las experiencias que vivió cuando aún era una niña, sumado al abuso de drogas al que se vio sometida a temprana edad gracias al desconocimiento de los efectos colaterales de las «medicinas prodigiosas» que se prescribían en los locos años 20 y 30 (para tener una idea nuestro querido amigo y psicoanalista Sigmund Freud prescribía cocaína para tratar la depresión como muchos de sus colegas de entonces) es que podemos entender la real dimensión de Beth Harmon y sus traumas.

Recomiendo muchísimo ver esta miniserie, sobre todo si tienes hijas o hermanas menores, pues es una historia de superación bastante inspiradora y que no se vale de feminizar a algún héroe de origen masculino, sino, por el contrario, construye una heroína desde cero y la dota de un trasfondo humano muy real que creo puede inspirar a las niñas a perseguir sus sueños sin importar cuáles sean.

Por otro lado, si la miniserie logra despertarles el bichito de querer acercarse al mundo del ajedrez, bienvenido sea, pues es un universo maravilloso que tuve la suerte de conocer en el colegio y aunque no he sido constante en su práctica, me sirvió mucho para moldearme como persona y estoy en pos de integrarlo a la vida de mi hijo. Finalmente, como diría Liev Tolstoi «Compadezco al que no conoce el ajedrez. Causa ya alegría al aprendiz; al veterano le lleva al sumo placer» («Ajedrez para todos». Henschel, 1981).

P.D.: Y con respecto a la moda ¡Ufff es un deleite! Solo por eso ya vale la pena ver la serie.

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