Detecta motobombas inoperativas y deficiencias en el resguardo de bienes humanitarios durante un operativo multisectorial

La capacidad de respuesta del departamento frente a lluvias, sismos y otros eventos de riesgo continúa seriamente comprometida. Esta vulnerabilidad no solo deriva de las emergencias recurrentes, sino también de las deficiencias encontradas en el Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER) de Lambayeque, donde el almacenamiento de bienes humanitarios y el estado de equipos esenciales revelan una situación crítica. Así lo evidenció la Contraloría General en el segundo día del operativo multisectorial que ejecutó en la región esta semana.

Durante la inspección, una comisión técnica constató la presencia de numerosas motobombas mal conservadas. Estos equipos, fundamentales para evacuar aguas durante la temporada de lluvias y evitar inundaciones, se encontraban expuestos a la intemperie o apenas cubiertos con plástico. Además, se identificaron máquinas en desuso y otras totalmente inoperativas, lo que merma la capacidad de atención inmediata ante emergencias.

A ello se suma que los tres almacenes construidos en el COER no pueden ser utilizados, debido a que la obra permanece paralizada desde octubre, pese a que debió concluirse el año pasado en un plazo de solo cuatro meses. El Gobierno Regional de Lambayeque destinó más de S/ 6 millones para esta infraestructura, pero la falta de avance en trámites relacionados con el componente eléctrico impide su puesta en funcionamiento. Esta limitación ocurre justo cuando la región afronta incendios, oleajes anómalos y diversos eventos que requieren bienes de ayuda listos para su distribución.

Otra observación formulada por la Contraloría fue el hallazgo de seis colchones deteriorados dentro de un hangar. Los auditores advirtieron que estos se encontraban en contacto directo con el piso y sin un manejo adecuado, lo que compromete su utilidad en caso de atención a familias damnificadas.

En ese contexto, el ente de control insistió en la necesidad de que el Gobierno Regional fortalezca su gestión del riesgo, especialmente ante la proximidad del verano, cuando aumentan las probabilidades de precipitaciones intensas y emergencias asociadas.

Universidad Nacional Pedro Ruiz Gallo: obras inconclusas y riesgos estructurales

La paralización de proyectos también se evidenció en la Universidad Nacional Pedro Ruiz Gallo. La construcción de los laboratorios de la Escuela de Ciencias Biológicas, iniciada en 2017, continúa sin concluir, pese a que ya se han invertido más de S/ 6 millones, cuando el contrato original ascendía a S/ 5 millones. Dicha obra ha pasado por dos resoluciones contractuales y se encuentra a la espera de definirse un nuevo saldo de obra.

Como consecuencia, más de 570 estudiantes permanecen a la expectativa de este proyecto académico largamente postergado. A esto se suma que el terreno presenta asentamientos y grietas que ponen en riesgo la infraestructura levantada.

Durante la visita al comedor universitario, los auditores verificaron que allí se sirven 350 raciones diarias para estudiantes de escasos recursos; no obstante, las condiciones de higiene presentan deficiencias. Se observó el lavado de utensilios con detergente en lugar de lavavajilla, un elevador de alimentos sin limpieza adecuada y el uso de equipos de refrigeración pertenecientes a la universidad por parte del proveedor.

Hospital de Ferreñafe y obras viales en Chiclayo también bajo la lupa

El operativo prosiguió en otros sectores. En el hospital de Ferreñafe, aún en fase de trabajos preliminares, se detectó retraso en la ejecución del plan de contingencia para garantizar la atención de pacientes mientras dure la obra, así como demoras en la aprobación de fichas técnicas y adquisición de disipadores sísmicos. La obra cuenta con una inversión de S/ 174 millones y su entrega está prevista para 2027.

De igual modo, la Contraloría inspeccionó los servicios de mejoramiento de transitabilidad vehicular y peatonal en la calle Sergio Bermejo Quiroga, la avenida Garcilaso de la Vega y la calle Juan Fanning, en Chiclayo, con el fin de evaluar su avance y cumplimiento técnico.